“El impacto de la emergencia sanitaria sobre el total del trabajo privado registrado se amortiguó por el paquete de medidas sociales y económicas aplicadas por la actual administración nacional”, indicó el informe elaborado por el Observatorio de Políticas Públicas de la Undav.
El reporte subrayó que “a fin de observar la dimensión del accionar de la actual administración nacional, cabe destacar que, en la crisis del 2002, el Producto Bruto Interno (PBI) se contrajo un 11% y el trabajo registrado privado retrocedió un 10%”.
“Mientras que entre enero y setiembre del año pasado, el PBI se retrajo un 12% con relación al mismo período de 2019 y el empleo registrado privado solo disminuyó un 4%, como consecuencia de las políticas sociales y económicas llevadas adelante por el Gobierno”, afirmó la Undav.
Al respecto, destacó que “la actual gestión llevó adelante un paquete de medidas sociales y económicas con el fin de reducir las consecuencias negativas en la actividad económica afectada por las restricciones impuestas a la circulación de personas”.
Para ello, puntualizó que “el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) asistió a todas aquellas personas con imposibilidad de trabajar a causa de la emergencia sanitaria y sostuvo la demanda de alimentos evitando un mayor crecimiento de la pobreza e indigencia y el desempleo”.
De igual modo, remarcó que “las empresas que mermaron su actividad por el riesgo sanitario fueron beneficiadas por los beneficios del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP)”.
Al mismo tiempo, indicó que “se lanzaron diferentes líneas de créditos subsidiados por el Estado, con el fin de financiar a las empresas que sufrieron el impacto de la cuarentena”.
Asimismo, subrayó que “la doble indemnización establecida desde el inicio del actual gobierno evitó que la tasa de desempleo aumente de manera súbita”.
“En consecuencia, las políticas económicas ejecutadas permitieron amortiguar la contracción de la demanda. Por lo mismo, por parte de la oferta, se evitó el cierre de cientos de miles de establecimientos productivos y sus consecuencias sobre el mercado de trabajo, como resultado de las medidas económicas llevadas adelante”, afirmó el análisis.
Concluyó que “por ello, la pérdida de empleo experimentada por la economía argentina, en un contexto de pandemia, fue una de las más bajas que se hayan registrado a nivel regional y mundial, como resultado de las medidas”.