El peritaje será a las 9 en la sede de la Policía Judicial que depende de la Procuración General bonaerense, en avenida 13 número 1667 de la capital provincial.
Tal como sucedió con los cuatro teléfonos celulares que el viernes pasado comenzaron a ser analizados, la idea es poder extraer toda la información contenida en las PC y tablets secuestradas en los allanamientos en los domicilios y consultorios del médico Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov.
Quienes viajarán a La Plata para controlar la cadena de custodia y la apertura de los sobres con los aparatos, serán el fiscal general adjunto de San Isidro, Cosme Iribarren, y la fiscal de Benavídez, Laura Capra.
“Buscaremos todo archivo, documento y correo electrónico referido al tratamiento de Maradona para complementar lo que encontremos en los celulares”, dijo a Télam uno de los investigadores judiciales.
También podrán asistir a la diligencia los abogados de las partes: Julio Rivas, defensor de Luque; el de Cosachov, Vadim Mischanchuk; y el abogado Mario Baudry, quien representa como particular damnificado al hijo menor de Maradona.
El viernes pasado, otras dos querellas se sumaron al expediente, por un lado, Dalma y Gianinna Maradona, las hijas que el “10” tuvo con Claudia Villafañe, quienes están patrocinadas por el abogado Federico Guntin, y por el otro, una de las hermanas del exfutbolista, Rita Mabel “Kity” Maradona, quien está representada por el abogado Yamil Castro Bianchi, socio de Matías Morla, quien era el actual apoderado del excapitán de la selección campeona del mundo en México 86.
Maradona, la mayor figura de la historia del fútbol mundial, murió a los 60 años el 25 de noviembre pasado al mediodía, en una casa que su familia había alquilado en el barrio privado San Andrés de Tigre, a dos semanas de su externación de la Clínica Olivos, donde había sido sometido a una neurocirugía por un hematoma subdural en el cerebro.
La autopsia determinó que el “10” murió como consecuencia de un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada” y descubrieron en su corazón una “miocardiopatía dilatada”.
La investigación del equipo de fiscales, integrado por Capra, Iribarren y Patricio Ferrari, y creado por decisión del fiscal general de San Isidro, John Broyad, se centra en tres ejes principales: si hubo negligencia médica y por lo tanto un eventual “homicidio culposo”, quién tuvo responsabilidades sobre ese posible delito y si la muerte de Maradona se pudo haber evitado.