En medio de las negociaciones entre el Gobierno nacional y las provincias argentinas, el tratamiento del Impuesto a las Ganancias emerge como un punto de fricción significativo. La gestión libertaria busca resucitar la cuarta categoría del impuesto, con la esperanza de aliviar la carga financiera de los distritos, pero esta medida ha generado reacciones diversas entre los líderes provinciales.
Los gobernadores de la Patagonia y de Unión por la Patria han expresado su rechazo a la reinstauración de la cuarta categoría, planteando alternativas para resolver la situación fiscal de las provincias. Entre estas propuestas se incluye la coparticipación del Impuesto al Cheque o la delegación de atribuciones impositivas por parte del Gobierno nacional, como los impuestos sobre los combustibles.
Por otro lado, en el Norte Grande del país, algunos gobernadores muestran una postura más receptiva hacia el retorno de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias. Esta divergencia de opiniones promete ser uno de los temas centrales en la próxima cumbre de gobernadores, programada para el 26 de marzo en Salta.
Las negociaciones continúan en curso mientras se exploran distintas alternativas para abordar la situación fiscal de las provincias y encontrar un punto de acuerdo que satisfaga tanto a los líderes regionales como al Gobierno nacional.