Prácticamente ningún dirigente macrista se refirió a la grave denuncia del gobierno de Bolivia que aseguró que la administración de Mauricio Macri envió material bélico para apoyar el golpe de Estado de 2019. De hecho, mostró una carta de agradecimiento de las fuerzas armadas a la Argentina.
Después de un silencio de 20 horas, Patricia Bullrich sacó un escueto comunicado en el que insólitamente habló de una “colaboración humanitaria”.
Además, agregó que protegió a los miembros del gobierno de Evo Morales, a quien Macri le negó asilo en el país.
La respuesta de la presidenta del PRO es inaudita y no explica lo obvio: si la ayuda fue para resguardar a funcionarios del gobierno de Evo Morales. ¿Por qué recibió el agradecimiento, por carta, de los golpistas? ¿Qué pasó con ese material bélico que los sediciosos bolivianos agradecieron por haber recibido?