El gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, ha manifestado un fuerte rechazo a la decisión del Gobierno nacional de reducir los fondos destinados a las provincias para beneficiar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Esta medida, que implica una ampliación de partidas por $450 mil millones para cumplir con una orden de la Corte Suprema, fue calificada por Zamora como un “artero ataque al federalismo” y una “burla al resto del país”.
Reclamo judicial en defensa del federalismo
En una rueda de prensa y a través de sus redes sociales, Zamora expresó su indignación: “Nos están quitando 47.000 millones de pesos a las provincias para cumplir con la coparticipación de CABA. Es fácil avasallar sin consecuencias a las provincias argentinas”. Ante este escenario, el mandatario santiagueño señaló la posibilidad de llevar el tema a la Justicia: “Vamos a tener que empezar a pensar algunas cuestiones judiciales”, advirtió.
La prioridad del Gobierno y la discriminación a las provincias
Zamora, junto a otros gobernadores de Unión por la Patria (UxP), ha mostrado una creciente preocupación ante la presentación del próximo presupuesto nacional. En su declaración, criticó que, mientras las provincias enfrentan dificultades por la caída de la recaudación y la falta de fondos para áreas clave como salud y educación, la prioridad del Gobierno parece estar en CABA. “Nos sentimos totalmente atacados por una discriminación”, subrayó, refiriéndose al impacto directo que esta medida tendría en el federalismo.
Aporte de Santiago del Estero y reclamo de justicia
El gobernador resaltó además el aporte de Santiago del Estero en términos de balanza comercial, afirmando que su provincia exporta más dólares que los que consume, a diferencia de la capital. “Nos quitan fondos cuando hemos aportado más de lo que gastamos. Esto es una injusticia”, denunció.
Compromiso con el diálogo y firme defensa del interior
Finalmente, Zamora reafirmó su compromiso con el diálogo y la búsqueda de consensos, pero advirtió que no aceptará decisiones que socaven el federalismo y perjudiquen a las provincias. “El federalismo es la sangre y la vida de nuestros hijos. No podemos ser subestimadas”, concluyó, dejando en claro su postura firme en defensa de los intereses del interior del país.