Una vez más, la violencia se convierte en noticia a partir de un grave hecho que sucedió en un boliche en Mar del Plata, donde un joven de 20 años recibió un botellazo en la cabeza y tuvo que ser internado por un derrame cerebral. Se trata de Matías Morín, quien por estas horas lucha por su vida en un hospital privado de Mar del Plata.
El hecho ocurrió ayer a la noche en el boliche “Ananá” ubicado en Playa Grande, cuando los amigos de Matías habían tenido un entrecruce con otro grupo de jóvenes, oriundos de Rosario. Las versiones indican que Matías se acercó a consensuar y allí recibió un botellazo y otros golpes, que lo dejaron inconsciente.
“Uno de los amigos de Matías fue al baño y un chico de otro grupo le pegó en la boca. Los amigos de Matías salieron de ahí, le dijeron y cuando él se acercó para hablar no pudo hacerlo: le partieron una botella de champagne por la cabeza”, contó para La Capital, el padre de la víctima, Carlos Montín.
El hombre explicó que sui hijo “se acercó para consensuar, para que no haya pelea”, y los agresores no midieron palabras y decidieron “partirle la botella” en la cabeza.
Montín agregó que su hijo se encuentra estudiando ingeniería y lo definió como “un chico tranquilo”. El padre del joven de 20 años admitió que Matías se encuentra transcurriendo “horas críticas”. “Está consciente, pero le puede pasar cualquier cosa”, contó.
En enero del año pasado, el país entero se conmocionó por el feroz ataque de un grupo de más de 10 rugbiers, que mataron a patadas en el suelo a Fernando Báez Sosa, en Villa Gesell.