“La Argentina tiene un organismo de gran prestigio, que es la Anmat, con gente muy calificada y amplia experiencia en la evaluación de nuevas tecnologías, medicamentos y vacunas. Por eso debemos comprender que más allá de lo que nosotros podamos sentir o pensar sobre que tratamientos son mas útiles que cuales en diferentes enfermedades, debemos actuar en base a las recomendaciones de la Anmat”, explicó.
Durante la conferencia de prensa sobre la situación epidemiológica en la Ciudad, Quirós reiteró que el organismo nacional es quien recomienda utilizar determinado producto “en base a la evidencia científica y ese tratamiento no está aprobado por la Anmat, está prohibido en la Argentina. Si la Anmat no aprueba el medicamento, no debe aplicarse a humanos”,
Por otra parte, el funcionario porteño fue consultado sobre la complicación del comienzo de las clases presenciales ante un rebrote, y explicó que “la mayoría de los países tiene la misma mirada, la contagiosidad de los niños a los adultos es inferior a la contagiosidad promedio, pero el daño a los niños por no tener actividades presenciales es muy alto, y creemos que tenemos que empezar las clases con la mayor presencialidad posible”.
“Estamos trabajando con la ministra de Educación, Sol Acuña, para presentar de forma segura, organizada, la vuelta a clases, adaptada a la realidad epidemiológica. Pero nuestra decisión política es en iniciar las clases de manera presencial”, indicó.
Y agregó: “Mientras trabajamos para que las escuelas tengan suficiente ventilación, pero insistimos en ese concepto: esta enfermedad es difícil de predecir muchas semanas para adelante, pero el 17 lo evaluaremos y lo presentaremos a la sociedad”.
Sobre el plan para aplicar las vacunas Sputnik, Quirós manifestó que “si bien hay un debate internacional en EEUU e Inglaterra sobre cómo aplicar de manera más eficaz las vacunas que tienen ambas dosis con el mismo componente, lo que voy a decir no aplica sobre la vacuna rusa porque tiene diferentes componentes”.
“Las vacunas han sido evaluadas experimentalmente en la fase 3, y se hizo de manera acelerada porque tomamos decisiones con cortes interinos, es decir no está terminada la fase, por eso digo que es poco prudente cambiar la modalidades que se ha evaluado, es preferible cumplir con los esquemas tal cual fueron investigados”, precisó el ministro de Salud porteño.
Al respecto, aseguró que “nos confirmaron que vamos a tener el segundo componente de las 24 mil que correspondieron a la Ciudad, que son exclusivamente para trabajadores de salud”.