La asistencia a las escuelas se había suspendido entre el 7 y 18 de junio debido a los elevados registros de casos positivos de Covid-19 y por el incremento de ocupación de camas críticas de las Unidades de Terapias Intensivas (UTI) destinadas al tratamiento de coronavirus que había alcanzado el 87,9% y, según el último informe oficial emitido anoche, hoy está en el 79,9%.
En el marco de las nuevas medidas, que rigen desde el último sábado, el Gobierno provincial anunció el regreso a la presencialidad en localidades con menos de 30.000 habitantes, por lo que mañana en más de 400 municipios y comunas retornarán las clases en los establecimientos con alternancia de grupos de alumnos de acuerdo a las burbujas establecidas.
Ayer, el secretario general de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), Juan Monserrat, transmitió en diálogo con Télam su posición contraria al retorno a las clases presenciales en el actual contexto de la provincia.
“Córdoba está atravesando por una crítica situación sanitaria y el Gobierno provincial debería reflexionar al respecto y mantener la modalidad virtual de las clases”, dijo a esta agencia.
El viernes, la UEPC había difundido ya un comunicado calificando de “poco verosímil” los informes epidemiológicos oficiales del Gobierno provincial al sostener que no reflejan la “saturación del sistema sanitario”.
La entidad sindical consideró en ese contexto que “el retorno a la presencialidad puede volver aún más compleja la crisis sanitaria” que atraviesa el distrito y señaló que hay unos 2800 docentes que “aún no han sido vacunados” y esperan la convocatoria para la inmunización.
En tanto hoy, la secretaria adjunta de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), Zulema Miretti, calificó de “inexplicable” la decisión del Gobierno de Juan Schiaretti de volver a las clases presenciales y dijo que es “para nada responsable” y que “no contempla la realidad”.
“Es una decisión para nada responsable que no contempla la realidad y que va a agravar aún más la crisis sanitaria”, dijo la dirigente en diálogo con AM 750.
Agregó que “la crisis sanitaria no ha terminado y la presencialidad no es segura” tras insistir en que se trata de “una decisión inexplicable”.
Recordó también que “Córdoba tiene una incidencia de 1284 contagios por cada 100 mil habitantes” y señaló que “la referencia del DNU presidencial habla de 500 casos por cada 100 mil habitantes”.
También dijo que si bien la ocupación de camas está al 79 por ciento (un número por debajo de lo dispuesto por el Gobierno nacional), “para alcanzar ese porcentaje se agregaron 100 camas nuevas” y, además, “no hay quién atienda, no hay personal, ni respiradores”.
En Córdoba, la modalidad o presencialidad de acuerdo a la cantidad de habitantes se aplica tanto para jardines de infantes, escuelas primarias y secundarias.
En todos los casos, las escuelas de modalidad especial estarán abiertas y a disposición de aquellas familias que decidan enviar a sus hijos.
Las localidades en las que continuará la virtualidad son: Córdoba, Malagueño, Saldán, Mendiolaza, Malvinas Argentinas, La Calera, Villa Allende, Alta Gracia, Río Cuarto, Las Higueras, Santa Catalina -Holmberg, Río Tercero, San Francisco, Bell Ville, Villa Carlos Paz, Bialet Massé, Cosquín, Santa María de Punilla, Villa María, Villa Nueva, Cruz del Eje, Villa Dolores, San Pedro, Jesús María y Colonia Caroya.
El Gobierno informó que la Comisión Provincial Educación Salud continuará monitoreando semana a semana la situación epidemiológica y cotejándola con los indicadores sanitarios previstos, e indicará la suspensión de la presencialidad en aquellas escuelas o localidades donde la realidad así lo requiera.