Es que según dio a conocer ayer la Junta Electoral del partido “se han recibido numerosas solicitudes de compañeros presidentes de distintos Consejos de Distrito solicitando la suspensión de las elecciones partidarias previstas para el 19 de diciembre próximo atento la superposición de plazos entre el cronograma electoral vigente y la fecha prevista para las próximas elecciones generales del 14 de noviembre de 2021”.
A primera vista podría entenderse como una maniobra para demorar la llegada del diputado nacional al mando del peronismo provincial, pero no, las “numerosas solicitudes” a las que hace referencia el texto son parte de la propia estrategia del dirigente de La Cámpora.
“Máximo va a ser el próximo presidente del PJ, de eso no hay dudas. Pero para tener representación en los municipios y poder inclinar la balanza en su favor, se necesita más tiempo”, dijo el jefe comunal del Conurbano.
El hijo de la vicepresidenta Cristina Fernández iba a asumir el próximo 19 de diciembre, dos días después del fin del mandato de la cúpula actual, los intendentes Gustavo Menéndez (Merlo) y Fernando Gray (Esteban Echeverría) quienes venían alternando la presidencia en los últimos años.
En un principio la idea era desdoblar la elección partidaria y que Máximo asuma en diciembre para después “construir los puentes necesarios”, pero se resolvió ir por los “canales más simples”.
La fecha será la misma que se manejaba para la municipal: 27 de marzo, tres días después del Día Nacional de la Memoria, la Verdad y la Justicia. Por lo que la presentación de listas terminará el 23 de febrero.
Seguramente Fernando Gray siga representando la oposición que mostró ni bien se armó la idea original de que Máximo asuma”.
El jefe comunal continúa haciendo una campaña completamente municipal con el fin de no nacionalizar la elección y reforzar los hitos locales. Primer indicio de lo que vendrá.